A por la 15 en Wembley. Real Madrid y su épica contra el Bayern Múnich.

En una eliminatoria que estuvo muy igualada, ambos equipos exhibieron su jerarquía europea en cada minuto de juego. Sin embargo, fue el Real Madrid quien emergió victorioso en una llave que fácilmente podría haberse inclinado en cualquier dirección.

El Bayern Munich, dirigido por Thomas Tuchel, demostró ser un grande europeo desde el primer silbato. Su juego incisivo y su determinación dejaron claro por qué son uno de los equipos más respetados del continente. Sin embargo, su desliz hacia la ingenuidad en momentos críticos les costó caro. Al tomar la delantera, subestimaron la capacidad de reacción del Real Madrid, lo que finalmente resultó en su eliminación.

Por otro lado, el Real Madrid bajo la dirección de Carlo Ancelotti, mostró una resistencia impresionante ante un Bayern ordenado. Sin embargo, los blancos no lograron encontrar su ritmo característico bajo el planteamiento táctico del Bayern. Aunque Vinicius Junior brilló con una gran actuación, fueron los cambios estratégicos de Ancelotti los que realmente inclinaron la balanza a favor del Madrid.

Es innegable que el Real Madrid parece tener una atracción por las remontadas y el drama en los minutos finales. Esta tendencia, aunque angustiante para los aficionados, parece ser un catalizador para el equipo, que una y otra vez demuestra su capacidad para superar adversidades.

Ahora, con la final a la vista, el Real Madrid comprende la magnitud de la oportunidad que tienen frente a ellos: la posibilidad de levantar su decimoquinta Champions League. Sin embargo, no subestiman a su oponente en la final, el Borussia Dortmund. Aunque quizás no fuera el rival más anticipado al principio de la competición, su presencia en la final es un recordatorio de que en el fútbol todo es posible. El Real Madrid está listo para enfrentar este nuevo desafío con determinación y respeto.

Facto del partido: Tuchel perdió la eliminatoria, sus cambios después de ponerse por delante fueron imprecisos, ingenuos y cautelosos. Al final, cuando necesitaba atacar, no tenia herramientas que utilizar. Paradójicamente el Bayern Múnich es la nueva victima de Harry Kane.